Hoy vamos a trabajar la imaginación en palabras. En cien, exactamente. Sí, cien palabras. Como inspiración, bien nos pueden servir los "Cuentos de cien palabras" de Jordi Cebrián. Y uno de ellos me parece especialmente original e impactante. Vamos a leerlo, a identificar las claves de su impacto en el lector y, después, disfrutaremos de un corto de animación realizado por una lectora y que, como dice el propio Jordi Cebrián en su blog, también nos gusta mucho cómo le ha quedado.
Después, busquemos nuestra propia inspiración. Os dejo a continuación una serie de imágenes de mi galería de viajes. A partir de ellas, tenéis que escribir una historia de cien palabras. Sí, por supuesto: inicio, nudo y desenlace y, a ser posible, con elemento final sorprendente, ese es un factor esencial en este tipo de textos breves.